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29 de junio de 2014

Sueños de dioses y monstruos - Laini Taylor

Título: Sueños de dioses y monstruos
Autora: Laini Taylor
Editorial: Alfaguara juvenil
Saga: Hija de Humo y Hueso #3
Páginas: 614
ISBN: 9788420416632 
Érase una vez un tiempo en el que solo existía la oscuridad. Y monstruos grandes como mundos que vagaban por ella. Hasta que llegó un amor tan poderoso que unió todos los mundos... con puntadas de luz. 
La joven Karou ha tomado el control sobre la rebelión quimérica y ahora el futuro de su raza depende e ella, si es que aún queda futuro para las quimeras en Eretz, una tierra asolada por la guerra. Pero cuando el brutal ejercito de serafines de Jael traspasa al mundo humano, lo impensable se convierte en esencial: Karou y Akiva tendrán que unir sus ejércitos para luchar contra un enemigo común. Esta unión de ambos ejércitos es una versión alterada de su antiguo sueño donde ángeles y quimeras conviven juntos, en paz. ¿Pero habrá lugar en este nuevo mundo para el imperdonable amor entre un ángel y un demonio? Desde las calles de Roma hasta las cuevas de los Kirin, humanos, quimeras y serafines lucharán, amarán y morirán en un teatro épico que trascenderá el bien y el mal, la amistad y el odio. Y mas allá de las fronteras del espacio y el tiempo, ¿qué sueñan dioses y monstruos?
"Sueños de dioses y monstruos" es tercera parte de la saga que se inició con "Hija de humo y hueso", al que siguió "Días de sangre y resplandor". Si no os habéis leído los otros dos libros, os recomendaría que no siguierais leyendo esta reseña, ya que lo mas probable es que os desvele cosillas que suceden en los dos libros anteriores. ¡Avisados quedáis!



OPINIÓN

Érase una vez un ángel y un demonio que se llevaron la mano al corazón y desencadenaron el apocalipsis

Esta saga me enganchó desde el minuto cero del primer libro. Me llamó la atención el argumento (toda la historia de las quimeras, los serafines...), ya que suelo tirar mucho hacia la literatura juvenil de corte más fantástico. Me encanta como la autora crea un mundo de cero a partir de una realidad que ya existe, como combina ambos mundos dándole a Eretz sus propias razas y leyendas. Sinceramente, esto es algo que valoro mucho a la hora de leer este tipo de literatura, ya que hay algunos autores que muchas veces tratan de abarcar demasiado a la hora de crear otro mundo y al final la acaban liando dando la sensación de que cojea un poco.

La anterior novela nos deja con ambos ejércitos, Ilegítimos y quimeras, juntos en las cuevas de los kirin y sin mucha perspectiva de futuro en cuanto a lo que convivencia se refiere. Laini Taylor retoma la historia en este punto, avanzando en la relación entre Akiva y Karou mientras estos intentan que las quimeras y los serafines lleguen a una tregua para enfrentarse juntos a Jael (alias el superserafín supermalvado). Eso si, son 600 páginas para contarnos lo que sucede en apenas una semana, por lo que en ocasiones la narración se hace un poco pesada y lenta... Ahora, a parte de contar lo que sucede con las quimeras en Eretz por medio de Karou, Zuzana, Akiva & co se nos introduce una historia nueva ambientada en la historia, la de Eliza.

Personalmente esta historia me ha sobrado bastante la mayor parte del libro. Es un personaje que ni me va ni me viene, y la historia a veces me ha dado la sensación de que estaba metida bastante con calzador. A la hora de presentar personajes me gusta que el autor deje bien claro su historia, para poderme poner en contexto y tratar de comprenderlo mejor. Pero esto con Eliza no me ha pasado, me daba la sensación de que llegaba sin ser nadie, de la noche a la mañana, de repente le empiezan a pasar cosas chungas, se tira medio vegetal un rato y cuando despierta pues resulta que mola un puñado y es algo así como una profetisa de los cielos. Erm, nope.


Hablando de historias inconclusas y poco claras, otro punto que tampoco me ha convencido demasiado ha sido la historia de Akiva y los Stelian. Es decir, no se explica mas que a grandes rasgos el origen de la magia de Akiva, solo que lo ha estado haciendo mal toda la vida y que va a desatar una guerra chunguisima de la muerte, por lo que se tiene que ir con ellos. A partir de este punto pensaba que se iba a profundizar un poco mas en los Stelian, Akiva, sus orígenes, su familia... pero no. Mas incógnitas y cosas sin terminar de atar del todo a mi gusto.


Los personajes me encantan, cada uno aporta un punto de vista y un tipo de sentimiento diferente. Akiva y Karou son el eje central, con todo el peso de la guerra sobre sus espaldas, ambos cargan con el destino de sus razas sobre la espalda, se podría decir que son... ¿los estresados?. Van de aquí para allá pensando mas el resto que en si mismos. Sin embargo, en contraposición tenemos a Mik y Zuzanna, una pareja que personalmente me parecen súper tiernos (♥♥♥) y que dan una visión mas alegre y dicharachera, haciendo reír al lector y viviendo su historia como si fuese un cuento de hadas (pero sin caer en romanticismos pastelosos y ganas de vomitar arco iris, lo cual me encanta. La pareja Ziri- Liraz me sobra un poco, eso de acabo de conocerte sin conocerte y de la noche a la mañana paso de ser un tempano de hielo a creerte mi amor verdadero me cojea un poco, pero bueno. Peores parejas se han visto en la literatura juvenil.


RESUMIENDO

Sin embargo y pese a todo esto la historia me gusta, y la manera de llevarla y narrarla también. Quizás tenía demasiadas expectativas en este libro ya que los dos anteriores me habían gustado muchísimo y de ahí que mientras iba leyendo fuese sacando defectillos. Pero no es un libro malo ni mucho menos. ¿Alguna cosa a mejor? El final tan abierto que deja. No he leido nada de un cuarto libro, y los finales de "fueron felices y comieron perdices" me suelen gustar mas que los de "y miraron al atardecer pensando que les depararía el mañana". Pero oye, esto ultimo ya va a gusto del consumidor ;D


                                                                                     

                                                                                                      3/5~



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